domingo, 20 de septiembre de 2009

Freud a la carta (o: Psicólogos "tutti"lógicos)

Freud tomando mate-Caricatura de Bob Row

A raíz de mi dolencia y sus avatares melodramáticos, recibí un mail de un amigo de toda mi estancia en el sur (28 años y medio), en el cual me deseaba buena suerte y todas esas cosas.

Él vive desde 2004 en la CABA ya que su esposa está batallando desde entonces, hasta ahora auspiciosamente, contra una cruel enfermedad. Y me contaba, hablando de seguimientos adecuados que yo menciono en el post anterior, lo siguiente que le ocurrió hace unos años.

Un día entran dos médicos de Oncología, presumiblemente residentes de tercer año, o sea casi Especialistas en Oncología, o sea casi ONCÓLOGOS. Sus chapas podrán decir Dr. Fulanito - Oncólogo y no deberán disimular su falta de especialidad bajo títulos ambiguos como Dr. Vergazza - Cáncer de piel, o Dr. Chantúnez - Oncología, como vemos en ésta y tantas otras especialidades.

El asunto es que uno de los médicos le ofrece, para su esposa cuyo caso no era terminal, los oficios de un PSICÓLOGO ONCOLÓGICO. Así tal cual, sin anestesia.

Ustedes habrán visto que no soy muy afecto a los psicólogos ni a cualquier otro que trate de encorsetrar el comportamiento humano en un modelo, que puede tener sentido probabilísticamente sobre grupos pero ser dudoso en casos individuales. En fin...

Esto me lleva a las siguientes reflexiones:

¿Dónde coños se estudia la especialidad Psicología Oncológica? ¿Cuántos años lleva especializarse?

¿Qué servicios ofrece, en casos como el de la esposa de mi amigo, que no es terminal? ¿y si lo fuera? Tal vez un sacerdote en este caso sería más adecuado, para el creyente.

¿Habrá Psicólogos HIVlógicos, Denguemorragilógicos?

No me voy a extender, pero en definitiva creo que, al igual que otros personajes de la actualidad, no son más que el sobrenadante chantún de una sociedad globalizada en la pelotudez.

Por eso no nos asombra que cualquier autodidacta autoconvocado, o cualquier advenedizo sin moral ni aptitudes opinen de lo que no saben y encima logren la adhesión popular.

Así pasa en política, leyes, deportes y la disciplina o tema en que se nos ocurra indagar.

En este mundo que nos imponen pululan con ventaja los "tutti"lógicos.

7 comentarios:

Eva Row dijo...

Muy bueno el post y buena la problemática que ponés en consideración.

La ciencia está amenazada por los chantas, por supuesto. El psicoanálisis no es una Ciencia. Cuando un médico o una maestra te manda al psicólogo, traducido quiere decir: me tenés podrido.

Cuando me llamó una maestra para decirme que mi hijo tenía que ir al psicólogo, le contesté que "mi religión me lo prohibe". Se asombró y me preguntó ¿cuál? El judaísmo, le contesté. Como la maestra era judía, me dijo ¿dónde dice la religión judía que no se puede ir al psicólogo? Le contesté: donde dice "Yo soy el señor tu Dios, no tendrás otro Dios delante de mí", es la primera ley. La maestra se calló la boca, y yo me fui contenta. Nunca más me molestaron con esas boludeces. Mi hijo les rompía las pelotas a los seis años. Otros chicos, realmente con problemas psicológicos, que permanecen sentaditos sin molestar, no son enviados al psicólogo porque no molestan en clase.

Otra: un médico cirujano que operó a mi mamá me llamó para decirme que mi mamá se quejaba de que yo no la venía a visitar. Yo iba todos los días, pero a mi vieja le gustaba quejarse de los hijos. El asunto es que la operación había salido mal, y el médico estaba intentando echarme a mí la culpa. Le contesté al médico: en un Tribunal usted no me va a poder acusar a mí de mala praxis filial, en cambio sí voy a poder yo acusarlo a usted de mala praxis médica, hágase cargo de lo que hace. Inmediatamente mi madre fue operada de nuevo y el problema solucionado.

Ahora, Surito, no te olvides de que la Ciencia está amenazada también por los fanáticos o fundamentalistas. Justamente, en reacción a la Psicología está operando la Neurociencia, metiéndose a prácticas aberrantes desde todo sentido. Por favor si podés, mirá hoy a la noche History Channel, van a repetir un programa donde una cirujana estudia "el pecado capital de la pereza". Y para estudiar eso hizo lo siguiente (que ella misma cuenta). Tomó un grupo de mujeres en perfecto estado emocional y logró que se depriman (ya acá tenemos una práctica inmoral que está tomando a las personas pobres como ratas de laboratorio, porque solamente los pobres se dejan hacer esas cosas). Después les miró el cerebro con tomografías y descubrió que en una zona, no indentificada anteriormente, el cerebro sufría cierto cambio, en todas las mujeres.
Encontrado lo cual crearon una terapia agresiva: cortar la cabeza en cirugía y mandar corriente eléctrica directamente a esa zona con la cabeza abierta. Obviamente que las primeras cirugías fueron a voluntad del paciente, porque es una etapa experimental. El tipo que puso la cabeza le entregó su suerte a alguien que estaba EXPERIMENTANDO una teoría. Eso sí, los pacientes tenían que haber fracasado con los medicamentos tradicionales. Muestran sin demasiadas estadísticas que algunos pacientes mejoraron.

Por favor: leé mi post:Bunge me salvó la vida
http://lacosaylacausa.blogspot.com/2008/05/bunge-me-salv-la-vida.html

Saludos, y bienvenido a La Cooperativa.

Surito dijo...

Eva: gracias por el comentario, ¡qué diferente a los de Clarín!, jeje. Así uno sale enriquecido con los comentarios.
Pero antes que nada, lo que agradezco profundamente es la ilustración que anexaste al post, y a su autor, que conozco a través de tus relatos. Es un honor.
Con respecto a las manipulaciones psicológicas, mirá algún documental de Adam Curtis (La Trampa) para entender un poco qué parientes tenía Freud.
Con la neurociencia, creo que es una palabra-idea que nos quieren inculcar como neociencia, pero se parece a prácticas de la Segunda Guerra, o Vietnam, ¿no?
Un saludo.

Ricardo Moura dijo...

Me han hecho acordar de una conversación que tuve hace poco con un amigo que vive en Francia, pero a pesar de las distancias tenemos en común el problema de que ya pasados los sesenta nadie nos da trabajo, y dice que se inventó un rebusque:

—Ahora soy gurú —dice—.

—¿Gurú? ¿Cómo es eso?

—Y… me inventé un sistema para ayudar a la gente que anda sin dar pie con bola…

—¿Como un sistema de esos “de auto-ayuda”?

—Sí, más o menos…

—¿Y en qué consiste?

—No sé cómo explicar… Una boludez, mezcla de un poco de sentido común y años vividos… Descubrí que parece que tengo “aptitudes” para eso —dice con algo de ironía—.

—¿y das charlas, conferencias?

—Claro, doy charlas y hago sesiones con grupos que vienen a mi casa.

—¿Y cobrás mucho por eso?

—Por supuesto. Si no cobrara caro podrían pensar que soy un chanta —se ríe—.

Surito dijo...

Ricardo: es que, como otros conceptos, hoy el sentido común y la experiencia te ofrecen aportarla desde los medios, están devaluadas. Entonces se las apropian, las reciclan en un jingle y la venden.
¡Y les da resultado!
Un saludo y gracias por pasar.

José Pepe Parrot dijo...

Me recordó a las ciencias triviales que inventaba Diotallevi con el otro personaje de El Péndulo de Foucault, de Umberto Eco.
Estaba empeñados en crear una universidad de trivialidades entre las que se encontraba por ejemplo, la Pilocatábasis (el arte de encontrarle el pelo al huevo) o la Avunculogratulación Mecánica (la ciencia de hacer máquinas para saludar a la tía).

Selente post y comparto sus sospechas.

Surito dijo...

Dormidano: prometo leer la obra porque me causa mucha gracia ese tipo de humor.
Pilocatábasis y Avunculogratulación. Genial.
Un saludo y gracias por pasar.

Anónimo dijo...

I inclination not agree on it. I regard as nice post. Expressly the title attracted me to study the unscathed story.