Francamente, una de las pocas cosas que aprendí con los años (al menos aprendí algo) fue que uno no trabaja con la realidad como le gustaría que fuera, debe trabajar con ella tal y como es. Platón es muy bonito en nuestras cabezas, pero en la vida diaria, si no encaramos el tema desde la realidad no llegaremos a ningún lado. Lo perfecto seguramente lo imaginamos muy diferente, pero esto es lo que hay, y sobre eso debemos sacar nuestras propias conclusiones, en nuestra búsqueda honesta de la verdad, si alguna existe; o si pretendemos al menos acercarnos a la nuestra.
Cuando tenía la mitad de la edad que ahora tengo, encaraba inexorablemente mis análisis desde el ideal. Como los filósofos más obtusos, miraba a la sociedad creyendo que era como yo pensaba que era y no como realmente era. Y algunos amigos, lamentablemente, se empeñan en continuar por ese camino. Algunos, sé que desde la buena leche, son recontra-opositores a la atroz dictadura totalitaria y recontra-maligna de los hombres K. Otros, por supuesto también desde la buena leche, me dicen que todos los críticos de nuestro gobierno son idiotas útiles, o llanamente lacayos de "Los dueños de Argentina".
Siempre digo que, desde mi humilde verdad, apoyaré, incluso defenderé con entusiasmo todo lo que sé que está bien, incluso si los que lo hacen están gobernando. Y criticaré, incluso con dureza todo lo que sé que está mal. No temo que los “bien pensantes” me acusen de oficialista, o de lo contrario, porque a veces tengo suerte, me preguntan por qué, y disfruto de su asombro al escuchar argumentos. Incluso a veces me responden con argumentos, y entonces lo disfruto aún más.
Intento que las palabras que uso sean mías, y también haberme ganado con esfuerzo la subjetividad desde donde las pronuncio. No debemos comprar opiniones enlatadas. Los que te prestan sus palabras son como los que captan nuevos clientes para su droga, la primera te la regalan y la segunda te la venden. Eco repetía palabras de otros porque estaba condenada por un dios a no tener propias, parafraseando a Galeano, hoy la costumbre lo ha convertido en virtud. No sé pensar si no es desde el debate. Sostengo con convicción que pensar la sociedad no debe ser una construcción individual, para que sea útil, válida, y tenga razón de ser, debe ser colectiva.
No es fácil con el ritmo de vida moderna hacerse un tiempo para escuchar todas las voces, las honestas y las interesadas, pero hay que intentarlo. Es muy necesario contrastar con el resto de los medios de información lo que uno lee, abrevar en los del “interior”, no sólo en los de Buenos Aires, y sobre todo, hacer un esfuerzo para luego contrastar las informaciones recibidas con la realidad. La acumulación y repetición de una sentencia no la convierte en verdad, y mucho menos en realidad. Y no siempre el papel de la prensa es el que deseamos.
Digo todo esto porque el gobierno argentino acaba de cruzar El Rubicón, y política y retóricamente, las dos orillas del Rubicón, separadas por un estrecho caudal muy fácil de cruzar, representan la seguridad de la pertenencia a la tiranía y la peligrosa libertad. Y como dijo Julio César: Alea iacta est, la suerte está echada…
"Air" Suite orquestal N° 3 en Re Mayor de J.S. Bach interpretadas mágicamente por Yo-Yo Ma y Bobby McFerrin
Crece desde el pie, musiquita,
crece desde el pie
uno dos y tres, derechita,
crece desde el pie.
Crece la pared por hiladas
crece la pared
crece desde el pie amurallada
crece desde el pie.
Crece desde el pie, musiquita,
crece desde el pie
uno dos y tres, derechita,
crece desde el pie.
Crece la pared por hiladas
crece la pared
crece desde el pie amurallada
crece desde el pie.
Dentro de su lata la mata
crece desde el pie,
crece desde el pie la fogata
crece desde el pie.
Crecen los mejores amores
crecen desde el pie,
para sus colores, las flores
crecen desde el pie.
Crece desde el pueblo el futuro
crece desde el pie,
ánima del rumbo seguro
crece desde el pie.
Cantan para usted los cantores
crecen desde el pie
un poco de fe y los tambores
pueden florecer.
Crece desde el pie la mañana
crece desde el pie
el sonido de la campana
crece desde el pie.
Crece desde el pie la semana
crece desde el pie
no hay revoluciones tempranas
crecen desde el pie.
No olvides que el día y la hora
crecen desde el pie
después de la noche la aurora
crece desde el pie.
Crece la pared por hiladas
crece la pared
crece desde el pie amurallada
crece desde el pie.
No olvides que el día y la hora
crecen desde el pie
después de la noche la aurora
crece desde el pie.
Crece desde el pueblo el futuro
crece desde el pie
ánima del rumbo seguro
crece desde el pie.
Crece desde el pie
de Alfredo Zitarrosa
(1984)
Cuando tenía la mitad de la edad que ahora tengo, encaraba inexorablemente mis análisis desde el ideal. Como los filósofos más obtusos, miraba a la sociedad creyendo que era como yo pensaba que era y no como realmente era. Y algunos amigos, lamentablemente, se empeñan en continuar por ese camino. Algunos, sé que desde la buena leche, son recontra-opositores a la atroz dictadura totalitaria y recontra-maligna de los hombres K. Otros, por supuesto también desde la buena leche, me dicen que todos los críticos de nuestro gobierno son idiotas útiles, o llanamente lacayos de "Los dueños de Argentina".
Siempre digo que, desde mi humilde verdad, apoyaré, incluso defenderé con entusiasmo todo lo que sé que está bien, incluso si los que lo hacen están gobernando. Y criticaré, incluso con dureza todo lo que sé que está mal. No temo que los “bien pensantes” me acusen de oficialista, o de lo contrario, porque a veces tengo suerte, me preguntan por qué, y disfruto de su asombro al escuchar argumentos. Incluso a veces me responden con argumentos, y entonces lo disfruto aún más.
Intento que las palabras que uso sean mías, y también haberme ganado con esfuerzo la subjetividad desde donde las pronuncio. No debemos comprar opiniones enlatadas. Los que te prestan sus palabras son como los que captan nuevos clientes para su droga, la primera te la regalan y la segunda te la venden. Eco repetía palabras de otros porque estaba condenada por un dios a no tener propias, parafraseando a Galeano, hoy la costumbre lo ha convertido en virtud. No sé pensar si no es desde el debate. Sostengo con convicción que pensar la sociedad no debe ser una construcción individual, para que sea útil, válida, y tenga razón de ser, debe ser colectiva.
No es fácil con el ritmo de vida moderna hacerse un tiempo para escuchar todas las voces, las honestas y las interesadas, pero hay que intentarlo. Es muy necesario contrastar con el resto de los medios de información lo que uno lee, abrevar en los del “interior”, no sólo en los de Buenos Aires, y sobre todo, hacer un esfuerzo para luego contrastar las informaciones recibidas con la realidad. La acumulación y repetición de una sentencia no la convierte en verdad, y mucho menos en realidad. Y no siempre el papel de la prensa es el que deseamos.
Digo todo esto porque el gobierno argentino acaba de cruzar El Rubicón, y política y retóricamente, las dos orillas del Rubicón, separadas por un estrecho caudal muy fácil de cruzar, representan la seguridad de la pertenencia a la tiranía y la peligrosa libertad. Y como dijo Julio César: Alea iacta est, la suerte está echada…
"Air" Suite orquestal N° 3 en Re Mayor de J.S. Bach interpretadas mágicamente por Yo-Yo Ma y Bobby McFerrin
Crece desde el pie, musiquita,
crece desde el pie
uno dos y tres, derechita,
crece desde el pie.
Crece la pared por hiladas
crece la pared
crece desde el pie amurallada
crece desde el pie.
Crece desde el pie, musiquita,
crece desde el pie
uno dos y tres, derechita,
crece desde el pie.
Crece la pared por hiladas
crece la pared
crece desde el pie amurallada
crece desde el pie.
Dentro de su lata la mata
crece desde el pie,
crece desde el pie la fogata
crece desde el pie.
Crecen los mejores amores
crecen desde el pie,
para sus colores, las flores
crecen desde el pie.
Crece desde el pueblo el futuro
crece desde el pie,
ánima del rumbo seguro
crece desde el pie.
Cantan para usted los cantores
crecen desde el pie
un poco de fe y los tambores
pueden florecer.
Crece desde el pie la mañana
crece desde el pie
el sonido de la campana
crece desde el pie.
Crece desde el pie la semana
crece desde el pie
no hay revoluciones tempranas
crecen desde el pie.
No olvides que el día y la hora
crecen desde el pie
después de la noche la aurora
crece desde el pie.
Crece la pared por hiladas
crece la pared
crece desde el pie amurallada
crece desde el pie.
No olvides que el día y la hora
crecen desde el pie
después de la noche la aurora
crece desde el pie.
Crece desde el pueblo el futuro
crece desde el pie
ánima del rumbo seguro
crece desde el pie.
Crece desde el pie
de Alfredo Zitarrosa
(1984)
2 comentarios:
Hola Rafa
Como ya comenté en tu blog: muy buen texto, desborda ética.
Te mando un abrazo
En tus textos siempre transmitís una tranquilidad que conmueve, porque se monta sobre conceptos: no sé cómo conseguís decir cosas que podrían formar parte de un texto enojado y fervoroso, pero en cambio remiten a la calma.
La idea de que pensar la sociedad no debe ser una construcción individual sino colectiva me parece de una sustancia primordial. Y es aquí donde fallan los líderes políticos tanto como los teóricos ideólogos, que creen que son los pastores de un rebaño, como decía un texto que amo: los teóricos "llevando a guisa de cayado la pluma".
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